Las autoridades de aviación del gobierno federal han tomado la decisión de reducir el límite de operaciones en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) de 52 a 43 vuelos por hora, a partir de octubre. Esta medida se implementa debido a la congestión en las dos terminales, según alega la administración de Andrés Manuel López Obrador. Fuentes del sector aeronáutico han confirmado esta información.
Se espera que el decreto sea publicado en la primera semana de septiembre, otorgando a las aerolíneas un plazo de poco más de un mes para realizar los ajustes necesarios. Este cambio coincide con el inicio de la temporada de invierno, que suele experimentar un aumento en el número de vuelos.
Sin embargo, el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET) ha advertido que esta reducción adicional en las operaciones en el AICM podría resultar en problemas, incluyendo una potencial disminución en el turismo. El presidente del CNET, Braulio Arsuaga, ha manifestado su preocupación y ha expresado el apoyo del organismo a la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero) en su llamado para detener esta situación que podría afectar la conectividad y disponibilidad de vuelos.
Arsuaga también ha recordado que a fines de 2022, la terminal y las aerolíneas ya habían acordado reducir las operaciones de 61 a 52 vuelos por hora, lo que llevó a que algunas empresas nacionales y extranjeras suspendieran operaciones en ciertos horarios.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha reaccionado a esta noticia, indicando que no puede aceptar decisiones unilaterales que obstaculicen la conectividad de México. El vicepresidente regional de IATA para América, Peter Cerdá, ha enfatizado que las decisiones de reducción de capacidad en un aeropuerto principal deben basarse en rigurosidad técnica y operativa, así como en procesos colaborativos y transparentes.