En un emocionante Clásico español, el Real Madrid logró una remontada espectacular para vencer al Barcelona 1-2. La figura del partido fue Jude Bellingham, quien anotó un doblete que desató la euforia en el Estadio de Montjuïc, en medio de la presencia de los icónicos Rolling Stones y un ambiente completamente rockero.
El Barcelona tomó la delantera en el sexto minuto con un tanto afortunado de Gündogan, quien se escapó frente al portero tras un desvío de la defensa del Real Madrid. A pesar de algunos intentos, los merengues no lograban reaccionar y el Barcelona dominaba.
El inicio de la segunda mitad mantuvo la tensión, con Iñigo Martínez estrellando un cabezazo en el poste a favor del Barcelona. El Real Madrid se salvó en más de una ocasión, incluso con una notable atajada de Kepa.
Pero el momento cumbre llegó al minuto 68 cuando, al ritmo de “Hey Jude”, el himno no oficial de Bellingham, el mediocampista inglés marcó un golazo desde fuera del área que dejó sin palabras a Ter Stegen y empató el Clásico. La euforia llenó el estadio, y el concierto de los Rolling Stones quedó en un segundo plano.
Pero Bellingham no se conformó con el empate y, de manera asombrosa, anotó el gol de la victoria para el Real Madrid, silenciando el estadio y haciendo retumbar aún más alto el “¡Hey Jude!”.
El Clásico español se convirtió en un espectáculo futbolístico y musical, con Bellingham como protagonista y los Rolling Stones como teloneros inesperados. Una noche memorable para los seguidores del Real Madrid y una victoria que quedará en la historia de los Clásicos.