La selección femenina de España ha logrado una victoria histórica al proclamarse campeona del mundo tras vencer a Inglaterra con un marcador de 1-0. Los festejos por este logro se han extendido por varias ciudades del país, congregando a miles de personas en un ambiente de euforia y celebración.
El WiZink Center, ubicado en el corazón de Madrid, se ha convertido en un epicentro de celebración donde multitudes se reunieron para festejar el triunfo de las campeonas del mundo. Otros lugares en España, como Pontevedra y Pórtol en Mallorca, también han sido testigos de la alegría desbordante de los aficionados.
La respuesta de la afición superó todas las expectativas, ya que las 7,000 entradas gratuitas puestas a disposición en el WiZink Center se agotaron en menos de una hora. Aquellos que no pudieron ingresar al recinto disfrutaron del partido en los bares cercanos al Palacio de Deportes, buscando refrescarse con una cerveza en medio de las altas temperaturas de más de 35 grados que se experimentaron en Madrid.
Durante los últimos siete minutos del partido, los aficionados mantuvieron la cautela mientras se acercaba el final. Sin embargo, una vez que se confirmó la victoria, las campeonas desataron la emoción de miles tanto dentro como fuera del WiZink Center. Canciones como “Yo soy español” y “Mi gran noche” resonaron en el ambiente, marcando una celebración histórica para el fútbol femenino.
La comunidad se unió en esta celebración, reconociendo la importancia de apoyar al fútbol femenino. Andrea, quien asistió al evento con su familia, expresó su sorpresa ante la cantidad de personas presentes y destacó que este apoyo es merecido por el “alucinante” desempeño en el mundial. La emoción se palpó en el WiZink Center, con múltiples oportunidades de gol que mantuvieron a la audiencia en vilo.
Este emocionante encuentro también tuvo un impacto en el tráfico de la tarde, que se vio reducido debido a la atención centrada en el partido. En Pòrtol (Mallorca), cientos de entusiastas aficionados se reunieron frente a pantallas gigantes para disfrutar del juego y celebrar el éxito de España.
Desde Palma hasta Mallorca, la emoción y el optimismo inicial se transformaron en una verdadera locura colectiva ante el triunfo 1-0. El partido, seguido con pasión en toda la isla, reunió a personas de diferentes lugares para compartir en la alegría del triunfo histórico de la selección femenina de España en el Mundial.
La capital balear organizó eventos en el Polideportivo Son Moix y habilitó video marcadores para que todos pudieran seguir el partido en detalle, demostrando el compromiso y entusiasmo de la comunidad ante este logro destacado.