El presidente colombiano Gustavo Petro enfrentó un significativo revés en las elecciones locales que se llevaron a cabo el domingo, ya que el candidato de su partido perdió la alcaldía de Bogotá a manos de un político moderado. En otras ciudades importantes como Medellín, Bucaramanga, Cali y Barranquilla, también se eligieron candidatos ajenos a la línea política de Petro.
Con el 100% de las mesas escrutadas en Bogotá, la Registraduría anunció que Carlos Fernando Galán obtuvo más del 49% de los votos, superando al candidato independiente Juan Daniel Oviedo y al petrista Gustavo Bolívar, quienes obtuvieron el 20% y el 18% de los votos, respectivamente. Estos resultados evitaron una segunda vuelta, ya que el primer candidato superó el 40% de las preferencias y lideró con al menos 10 puntos porcentuales sobre su rival más cercano.
Las urnas abrieron a las 8:00 a.m. hora local y cerraron a las 4:00 p.m. en todo el país, donde 38.9 millones de ciudadanos estaban habilitados para elegir a 1,102 alcaldes, 32 gobernadores, 12,072 concejales, 418 diputados de asambleas departamentales y 6,885 ediles o miembros de las Juntas Administradoras Locales.
Gustavo Petro felicitó a los ganadores y expresó su voluntad de trabajar en equipo para llevar adelante sus propuestas en el país. Carlos Fernando Galán logró la alcaldía de Bogotá en su tercer intento y se convierte en el segundo cargo de elección popular más importante del país. Esta victoria también fortalece al Nuevo Liberalismo, el partido revivido por Galán tras su fundación en la década de 1980 por su padre, Luis Carlos Galán.
En otras ciudades, como Medellín, Barranquilla, Bucaramanga y Cali, los candidatos ajenos a la línea política de Petro obtuvieron victorias significativas. Yann Basset, profesor de Ciencia Política de la Universidad del Rosario, indicó que la izquierda enfrenta desafíos en las elecciones locales a pesar de la victoria de Petro a nivel nacional, ya que el gobierno ha perdido popularidad desde su inicio hace un año.
Estas elecciones locales, a diferencia de las elecciones presidenciales de 2022, no se ven influenciadas de manera significativa por las protestas de 2021, que surgieron por la inconformidad social y contribuyeron a la elección de Petro. La inequidad social que causó malestar sigue siendo una preocupación, pero su impacto es menor. La jornada electoral estuvo marcada por algunos incidentes de violencia en diferentes regiones del país.
La situación de seguridad en algunas áreas rurales llevó a la suspensión temporal de las elecciones en Ricaurte, la presencia de miembros del grupo guerrillero ELN impidió que algunos votantes pudieran ejercer su derecho en Norte de Santander, y el cártel Clan del Golfo intimidó a electores en Bolívar. Las elecciones locales son las segundas desde que se firmó el acuerdo de paz en 2016 entre el Estado y las FARC.
La elección del alcalde de Bogotá ha sido un tema crucial para Petro, quien gobernó la ciudad entre 2012 y 2015 y está comprometido con la construcción de la primera línea de metro. Este proyecto ha sido objeto de debate, ya que Petro insiste en que parte de la línea sea subterránea, mientras que la actual alcaldesa, Claudia López, defiende el proyecto tal como está. La derrota de Bolívar plantea dudas sobre el futuro del metro y la posibilidad de un plebiscito para decidir su destino.
La elección de alcaldes y gobernadores en Colombia es una parte fundamental del sistema político del país y ha generado un debate en torno a la influencia de la izquierda y la estabilidad política en diversas ciudades importantes.