En un reciente pronunciamiento, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su descontento ante las medidas implementadas por el gobierno de Texas en la frontera con México. El mandatario calificó como “publicitarias” y “muy vulgares” las nuevas barreras fronterizas, que incluyen un cerco de alambre y una barrera de boyas en el río Bravo, con la finalidad de impedir el paso de migrantes.
Durante su conferencia de prensa matutina, AMLO instó a sus compatriotas a no votar por el gobernador de Texas, Greg Abbott, ni por los legisladores del Partido Republicano que apoyan dichas medidas. Afirmó que estas acciones buscan engañar al pueblo estadounidense y a los texanos, sugiriendo que son estrictos con la migración y el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.
El presidente desestimó la efectividad de estas acciones, tachándolas de “puro cuento” y “pura mentira”. En mayo pasado, el gobernador de Texas anunció la colocación de boyas gigantes para construir una barrera flotante en el río Bravo, con el objetivo de reforzar la seguridad en la frontera.
Sin embargo, AMLO minimizó la extensión de las boyas y señaló que solo cubren 300 metros, mientras que la frontera entre México y Estados Unidos cuenta con más de 3 mil kilómetros. El presidente cuestionó la demora en completar la barrera y señaló que hay temas más importantes que requieren atención.
Respecto al extrañamiento enviado por la Secretaría de Relaciones Exteriores de México a Estados Unidos, donde se argumentó que la colocación de las boyas viola el Tratado de Aguas entre ambos países, AMLO restó importancia al asunto, calificándolo como “politiquería”.
En conclusión, el presidente de México mostró su desacuerdo con las acciones del gobierno de Texas en la frontera, señalando que son meramente políticas y que se enfocan en la publicidad más que en abordar temas de relevancia para ambos países.
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