En un reciente desarrollo del caso Ayotzinapa, un juez ha dictado auto de vinculación a proceso contra Gualberto Ramírez Gutiérrez, quien fuera el titular de la Unidad Antisecuestros de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO). Ramírez enfrenta acusaciones de tortura en relación con uno de los implicados en este trágico caso.
El exfuncionario está siendo procesado por los delitos de desaparición forzada y tortura, aunque el juez no dictó auto de vinculación a proceso por coalición de servidores públicos e intervención de comunicaciones privadas, cargos que también le fueron imputados por la Fiscalía General de la República (FGR).
La audiencia tuvo lugar en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur y se llevó a cabo el sábado, tres días después de que se dictara prisión preventiva para el acusado. La detención de Ramírez tuvo lugar el 26 de junio y fue llevada a cabo por elementos de la Policía Federal en Tecámac, en la carretera federal México-Pachuca. Posteriormente, fue trasladado al Reclusorio Sur de la Ciudad de México.
Las acusaciones contra Ramírez Gutiérrez se centran en su presunta participación en actos de tortura y desaparición en el caso de Felipe Rodríguez Salgado, conocido como “El Cepillo”, quien fue detenido el 15 de enero de 2015 y es considerado un presunto miembro del Cártel de Guerreros Unidos.
Es importante destacar que también está involucrado en este caso Tomás Zerón, exdirector de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), quien actualmente se encuentra prófugo en Israel. Según la Fiscalía General de la República, Zerón y su equipo habrían torturado al detenido para obtener declaraciones que respaldaran la llamada “verdad histórica” en relación con la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Estos nuevos acontecimientos en el caso Ayotzinapa evidencian la importancia de la investigación en busca de la verdad y la justicia para las víctimas y sus familias.
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