Deportaciones de centroamericanos desde México y Estados Unidos caen un 39% interanual en primer semestre de 2023: OIM

Según datos recopilados por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y compartidos con la agencia EFE, las deportaciones de ciudadanos centroamericanos a El Salvador, Honduras y Guatemala experimentaron una disminución del 39% en el primer semestre de 2023 en comparación con el mismo período del año anterior.

Entre enero y junio de 2023, se registraron un total de 80,480 deportaciones, lo que representa 51,440 casos menos en comparación con los 131,920 casos contabilizados durante los mismos meses de 2022. Estos datos se obtuvieron de fuentes gubernamentales de cada país y reflejan una marcada disminución en las deportaciones.

Desglosando las cifras, El Salvador reportó 6,438 deportaciones, Honduras 31,474 y Guatemala 42,568 durante este período. La disminución en las deportaciones se tradujo en una reducción del 32.5% para El Salvador, 30.9% para Guatemala y 48.2% para Honduras.

En cuanto a la procedencia de las deportaciones, 49,493 provinieron de Estados Unidos, 30,618 de México y 369 de otros países no especificados. En general, las deportaciones desde Estados Unidos disminuyeron en un 17.5%, mientras que las deportaciones desde México experimentaron una disminución del 57.1%.

Estos datos sugieren una tendencia a la baja en las deportaciones de centroamericanos desde Estados Unidos y México hacia estos países de la región conocida como el Triángulo Norte. La situación migratoria en la región continúa siendo un tema importante en la agenda de América Latina y Estados Unidos.

Aumenta el flujo de migrantes en Eagle Pass, Texas, a pesar de barreras flotantes

En los últimos días, se ha observado un incremento en el flujo de migrantes, en su mayoría procedentes de Venezuela, que cruzan el río Bravo cerca de un puente de ferrocarril en Eagle Pass, Texas, desafiando las barreras flotantes con alambre de púas colocadas en las orillas. Reuters fue testigo del cruce de migrantes, incluyendo familias con niños pequeños, que sortearon las afiladas alambradas instaladas por la guardia nacional de Texas.

Una nueva norma implementada por el gobierno del presidente Joe Biden en mayo exige que los migrantes soliciten una cita para cruzar por un puerto de entrada legal a través de una aplicación gubernamental para teléfonos móviles conocida como CBP One. Aquellos que no cumplan con este requisito podrían enfrentar mayores obstáculos para obtener asilo y una posible deportación rápida.

A pesar de estas medidas y las barreras físicas en Texas, el flujo de migrantes ha aumentado en las últimas semanas, especialmente aquellos que huyen de Venezuela y han viajado a través de Sudamérica y Centroamérica. Este aumento ha provocado críticas políticas contra Biden, quien se presenta a la reelección en 2024. El expresidente Donald Trump, conocido por su enfoque de línea dura en inmigración, lidera las encuestas republicanas como posible rival de Biden.

Ni las barreras físicas ni las advertencias de las autoridades estadounidenses han disuadido a los cientos de migrantes que llegan a Eagle Pass desde la frontera mexicana de Piedras Negras. Muchos de ellos llegan después de un largo viaje a bordo de trenes de carga.

Este aumento en la llegada de migrantes ocurre a pesar de los esfuerzos de las autoridades mexicanas por evitar que los migrantes viajen hacia el norte a través de su país. Los migrantes, en su mayoría, buscan oportunidades laborales y una vida mejor para sus familias en Estados Unidos.

Empresarios del norte de México acusan al gobernador de Texas de obstaculizar el comercio

Empresarios y líderes empresariales del norte de México han denunciado la implementación de controles de seguridad por parte del gobernador de Texas, Greg Abbott, que han resultado en la detención de exportaciones mexicanas valoradas en 1,500 millones de dólares, impidiendo su paso por la frontera.

La iniciativa privada de Ciudad Juárez, ciudad fronteriza con Estados Unidos, ha criticado que este problema se haya convertido en un asunto político sin una resolución por parte de los gobiernos, lo que ha afectado a más de 5,000 trabajadores que se encuentran en paro técnico.

El problema ahora radica en las lentas revisiones del Departamento de Seguridad Pública de Texas, que mantienen a las cargas cruzando la frontera a un ritmo extremadamente lento, lo que ha afectado gravemente a la economía de la región fronteriza, que depende en gran medida de la maquiladora.

Thor Salayandía, vicepresidente Nacional de Maquiladora y Franjas Fronterizas de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, señaló que el daño es significativo y que el gobernador Abbott está utilizando el tema migratorio con fines políticos, perjudicando a la maquiladora y afectando a México y Estados Unidos.

Manuel Sotelo Suárez, vicepresidente de la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar), destacó la falta de coordinación y acción por parte de los gobiernos federales de México y Estados Unidos para resolver este problema, que ha dejado entre 10,000 y 11,000 cargas varadas, con un valor aproximado de 1,500 millones de dólares.

Esta situación ha reducido drásticamente el flujo de cargas de México a Estados Unidos, lo que ha llevado a la saturación de los pequeños almacenes de las maquiladoras y ha impedido la continuación de la producción.

Este conflicto comercial entre Texas y México muestra la necesidad de una mayor cooperación y coordinación entre ambas partes para evitar más daños económicos a la región fronteriza y resolver los problemas de manera efectiva.

Gobernador de Texas Declara “Invasión” en la Frontera con México y Refuerza Medidas para Controlar el Flujo Migratorio

El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha emitido una declaración oficial de “invasión” en la frontera sur del estado en respuesta al aumento significativo de la llegada de migrantes. Esta decisión ha llevado al despliegue de la Guardia Nacional de Texas, el Departamento de Seguridad Pública estatal y fuerzas policiales locales en la región.

La declaración de Abbott, compartida a través de sus redes sociales, está vinculada a las políticas de inmigración de la administración del presidente Joe Biden. Abbott ha expresado su preocupación por la falta de cumplimiento de las obligaciones constitucionales federales en la protección de los estados contra lo que él describe como una “invasión” de cárteles de la droga mexicanos.

En una carta dirigida al presidente Biden, Abbott hizo referencia al Artículo I, Párrafo 10, Cláusula 3 de la Constitución de los Estados Unidos, que permite a los estados defenderse contra lo que perciben como una amenaza a su territorio. En esta carta, Abbott expresó la necesidad de tomar medidas adicionales para salvaguardar la frontera de Texas.

La crisis en la frontera se agrava con un aumento en el número de migrantes que intentan cruzar hacia Estados Unidos, lo que representa un desafío significativo para el gobierno federal en su intento por controlar la situación. La ciudad de Eagle Pass, en la frontera con Coahuila, México, declaró un estado de emergencia debido a un aumento severo en la llegada de migrantes indocumentados.

En respuesta a la crisis, la Casa Blanca anunció el despliegue de elementos del Departamento de Defensa para apoyar al personal del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) en la frontera. El DHS ya cuenta con la presencia de 2,500 miembros de la Guardia Nacional para asistir a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés).

Además, el DHS está tomando medidas adicionales para intensificar el proceso de expulsión de familias que no cumplen con los criterios para permanecer en el país. También ha aumentado la capacidad en los centros de detención a lo largo de la frontera sur y ha incrementado el número de personas expulsadas del país.

Esta situación pone de manifiesto la creciente preocupación y los desafíos que enfrenta Estados Unidos en su frontera sur, y cómo las autoridades estatales y federales buscan abordar esta problemática en constante evolución.