Desde las elecciones donde Andrés Manuel López Obrador gano como presidente en 2018, el partido MORENA ha logrado obtener gubernaturas en distintos estados. Aunque solo se llevaron a cabo elecciones en dos estados, Coahuila y Estado de México, muchos analistas y políticos consideran que estas elecciones son de vital importancia. Además de los cargos en juego, este proceso electoral sirve como una prueba para medir el panorama político de cara al año 2024, cuando se elegirá al próximo presidente, así como a gobernadores, diputados, senadores, entre otros.
A partir de 2018, MORENA comenzó a conquistar gubernaturas en diferentes estados. Cuitláhuac García ganó en Veracruz, Adán Augusto López en Tabasco, Rutilio Escandón en Chiapas, Cuauhtémoc Blanco en Morelos (aunque él pertenecía a Encuentro Social, pero en alianza) y Claudia Sheinbaum en la Ciudad de México.
En cuanto al PAN, en 2018 logró mantener el gobierno de Guanajuato con Diego Sinhue Rodríguez, Yucatán con Mauricio Vila, y Puebla con Martha Erika Alonso. Sin embargo, Alonso falleció en un accidente de helicóptero pocos días después de asumir el cargo.
Los demás partidos no tuvieron la misma suerte que el PAN para mantener una situación más equilibrada en el territorio mexicano. Sin duda, Morena ha logrado su objetivo principal, que es tener una presencia dominante en el país y liderar decisiones importantes para México.
El PAN debe tomar medidas más impactantes y contar con un líder que tome las riendas del partido para posicionarlos en la presidencia del país. Si no toman estas medidas, corren el riesgo de ser excluidos del juego político y ser dominados por Andrés Manuel López Obrador y MORENA en toda la República.