Un nuevo estudio publicado en la revista Science sugiere que el sistema inmunológico de las madres “memoriza” embarazos anteriores y utiliza esta información para prevenir complicaciones en futuras gestaciones. Aunque el estudio se basó en investigaciones con ratones, se cree que la misma dinámica celular ocurre en los humanos.
Los científicos saben desde hace décadas que durante el embarazo, el sistema inmunológico de la madre se adapta para no atacar al feto, que de otro modo sería considerado un cuerpo “invasor”. Sin embargo, este nuevo estudio descubrió que la interacción entre las células de la madre y las del feto, conocida como diafonía, es más compleja y duradera de lo que se pensaba.
El estudio reveló que pequeños grupos de células del bebé, llamadas microquiméricas, pueden encontrarse en varios tejidos del cuerpo de la madre durante meses después del embarazo. Estas células ayudan a mantener linfocitos supresores en el organismo que reconocen al feto como parte de la misma pareja, evitando así el rechazo del embarazo.
El autor principal del estudio, Sing Sing Way, destacó que este mecanismo natural reduce el riesgo de complicaciones en futuros embarazos, como el parto prematuro y la preeclampsia. También señaló que comprender cómo funciona este proceso podría llevar a mejores tratamientos para embarazos de alto riesgo.
Way sugirió que los hallazgos podrían incluso tener implicaciones en la mejora de las vacunas, ya que se ha demostrado que la vacunación durante el embarazo puede proteger al recién nacido de enfermedades infecciosas antes de que pueda recibir sus propias vacunas.
Aunque se necesita más investigación para aplicar estos hallazgos en tratamientos clínicos, el estudio representa un avance en nuestra comprensión de cómo el sistema inmunológico de las madres tolera y se adapta durante el embarazo para garantizar la salud de la madre y el bebé.