Petróleos Mexicanos (Pemex) se encuentra actualmente enfrentando más de 100 litigios iniciados por proveedores durante la presente administración, según una auditoría interna realizada por la Dirección Jurídica de Pemex.
El informe revela que desde el 1 de enero de 2019 hasta el 23 de septiembre de 2022, se han identificado 136 juicios iniciados por o con proveedores contra Pemex y sus subsidiarias. El objetivo de esta auditoría fue analizar el estado procesal de estos litigios, su seguimiento y atención en beneficio de los intereses de Pemex, así como evaluar el riesgo legal y económico asociado a estos recursos legales.
La auditoría encontró que, en algunos casos, se han tomado acciones que reflejan una defensa jurídica adecuada y estrategias legales efectivas que favorecen a Pemex. Sin embargo, en otros casos, se observa un riesgo inminente de obtener resoluciones adversas para la empresa y sus subsidiarias debido a las circunstancias y características específicas de cada litigio.
La problemática de falta de pago e incumplimiento de Pemex a proveedores no es exclusiva de esta administración, ya que durante el gobierno de Enrique Peña Nieto también se enfrentaron conflictos similares. No obstante, en la actual administración, la deuda de Pemex con proveedores ha aumentado significativamente, lo que ha llevado al surgimiento de más litigios.
Según datos proporcionados por Pemex, la deuda con proveedores cerró en 149,843 millones de pesos durante la administración de Peña Nieto, aumentó a 208,034 millones de pesos en el primer año de la administración actual y llegó a 231,000 millones de pesos para el primer semestre de 2023.
Este problema se ha agravado recientemente con la reclamación de Hokchi Energy, una firma que notificó a Pemex sobre el inicio de un procedimiento de solución de controversias debido a la falta de pago por la venta de crudo y gas por un monto de 190 millones de dólares.
Además de los litigios, se ha identificado que los esquemas de factoraje utilizados por Pemex para pagar a proveedores representan un mayor costo financiero en comparación con la emisión de deuda. Esto ha generado preocupación sobre la capacidad de Pemex para cubrir sus adeudos de manera eficiente y sostenible.
En resumen, Pemex se enfrenta a una creciente cantidad de litigios iniciados por proveedores, lo que pone de manifiesto la compleja situación financiera y legal de la empresa estatal mexicana en el sector petrolero.