A menos de tres meses de la inauguración prevista para el Tramo 1 del Tren Maya, uno de los proyectos ferroviarios más ambiciosos de México, se ha registrado un estancamiento preocupante en su avance. Hace un mes, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) anunció que el proyecto tenía un progreso del 81.2%, y lamentablemente, el informe actual sigue reflejando la misma cifra.
El director general de la empresa Tren Maya, Óscar David Lozano Águila, ha revelado que, de los 226 kilómetros de vía férrea planificados que conectan Palenque con Escárcega, solo se han finalizado 185 kilómetros hasta la fecha. Sorprendentemente, este número es idéntico al reportado en el mes de agosto.
El gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, ha destacado los beneficios que se esperan del Tren Maya, incluso antes de su inauguración, mencionando que ya está contribuyendo al fortalecimiento de la economía, el desarrollo regional y el turismo en el estado. Sin embargo, el estancamiento en la construcción de algunos tramos plantea desafíos significativos.
Es importante señalar que el Tramo 5, 6 y 7 del Tren Maya también enfrentan un estancamiento en su construcción, con menos del 50% de avance según informes recientes de la Sedena. Este proyecto ferroviario de gran envergadura, que en su totalidad contará con 621 kilómetros de vías, aún enfrenta desafíos considerables.
A pesar de la fecha de inauguración programada para diciembre, el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2024 asigna la asombrosa suma de 120,000 millones de pesos al Tren Maya. Esta cantidad, sumada a los recursos ya asignados al proyecto, representa un aumento de costos del 208%. La situación plantea preguntas sobre la viabilidad del proyecto y la necesidad de abordar eficazmente los desafíos que enfrenta para cumplir con los plazos y las expectativas establecidas.