El presidente de México, AMLO, ha reconocido durante su conferencia matutina desde Palacio Nacional que el crimen organizado está recurriendo cada vez más al uso de explosivos en el país, especialmente en las zonas de Michoacán, Jalisco y Guanajuato, donde se confiscan constantemente este tipo de materiales. Sin embargo, a pesar de la violencia y el dolor que esto ocasiona, el mandatario rechazó clasificar el reciente atentado en Tlajomulco de Zúñiga como un acto de terrorismo.
En respuesta a la pregunta de los medios sobre si el ataque podría ser considerado como terrorismo, AMLO manifestó que no quería adelantar nada al respecto y que se debe examinar detenidamente el término. Hizo hincapié en que el concepto de terrorismo está más relacionado con aspectos político-ideológicos y fanatismos, y expresó su preocupación por no darle motivo a los “ultraconservadores” vecinos que desean aprovechar cualquier excusa para socavar la soberanía del país.
El presidente López Obrador señaló que el gobierno de Jalisco está llevando a cabo una investigación en la que su administración está brindando apoyo. Además, calificó el ataque contra los policías y agentes como una emboscada premeditada y cruel.
El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, informó que se ha puesto en marcha un operativo conjunto de fuerzas estatales y federales para dar con los responsables del ataque con explosivos que causó la muerte de seis personas, incluyendo policías y agentes de la fiscalía, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga.
A través de estas acciones, las autoridades buscan garantizar la seguridad y llevar a los responsables ante la justicia para mantener el orden y la tranquilidad en la región afectada.
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