En una movida política que ha generado controversia, el presidente salvadoreño Nayib Bukele se ha inscrito como precandidato del partido Nuevas Ideas para participar en los comicios presidenciales de febrero de 2024. En busca de gobernar el país por otros cinco años, Bukele enfrenta acusaciones de desafiar la Constitución, ya que abogados y opositores argumentan que la carta magna prohíbe la reelección. Acompañando al presidente en su fórmula, el vicepresidente Félix Ulloa también se ha inscrito como precandidato.
El partido Nuevas Ideas hizo el anuncio oficial en su cuenta de Twitter, comunicando al pueblo salvadoreño que tanto el presidente Nayib Bukele como el vicepresidente Félix Ulloa están inscritos como precandidatos para la presidencia y vicepresidencia de El Salvador, en el partido más grande del país. Posteriormente, el mandatario replicó el tuit en su propia cuenta.
En septiembre de 2021, Bukele anunció su intención de buscar la reelección luego de que la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, designada por sus aliados en el Congreso, lo habilitara para postularse. Aunque la constitución prohíbe la reelección presidencial, Bukele ha podido optar a ella debido a la interpretación de la sala, que sostiene que un artículo de la Carta Magna permite al presidente participar en la contienda electoral por una segunda ocasión, dejando en manos del pueblo la decisión final en las urnas. La sala también ha ordenado al Tribunal Supremo Electoral cumplir con esta resolución, y el Tribunal ha declarado su acatamiento a las disposiciones del máximo tribunal constitucional.
Sin embargo, abogados constitucionalistas argumentan que la postulación de Bukele viola al menos cuatro artículos de la Constitución, entre ellos el artículo 154, que establece que el período presidencial es de cinco años y comienza y termina el 1 de junio, sin que la persona que haya ejercido la presidencia pueda continuar en funciones más allá de esa fecha.
Bukele, quien asumió la presidencia el 1 de junio de 2019 y ha mantenido un alto nivel de popularidad que no ha bajado del 80%, ya ha recibido el respaldo de los partidos aliados en el Congreso para su reelección. Su imagen se ha fortalecido gracias a su enfoque en combatir las pandillas que aterrorizaban a la población. Según encuestas recientes, más del 90% de los salvadoreños están a favor de las medidas de seguridad implementadas por Bukele.
El registro de Bukele como precandidato presidencial ha generado un intenso debate en El Salvador, poniendo en tela de juicio los límites de la Constitución y la interpretación de los poderes judiciales en relación a la reelección presidencial.
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