Partidos de oposición urgieron al Instituto Nacional Electoral (INE) a implementar acciones para blindar el proceso electoral de la violencia y el crimen organizado, así como un atlas de riesgo para detectar focos rojos; Morena respaldó la estrategia del INE y acusó de hacer “politiquería”.
En la sesión del Consejo General, Rubén Moreira (PRI) pidió: “Que sea una acción en pro de toda la democracia, que todos los partidos digamos que el narco no puede apropiarse del Gobierno de ningún orden”.
Por su parte, Ángel Ávila, representante del PRD, alertó que el crimen organizado ya está presente en el proceso electoral, y consideró que el INE ha quedado a deber en acciones en materia de seguridad.
En respuesta, el diputado de Morena, Sergio Gutiérrez Luna, acusó que la oposición usa el tema de la inseguridad por “politiquería” y aseguró que la ruta que ha implementado el INE ha sido adecuada, ya que se han realizado 266 mesas regionales de los 300 distritos electorales.
Por su parte, la consejera Norma de la Cruz exhortó a los partidos políticos a que: “Garanticen que las personas que traigan aquí, como candidatas, no estén vinculados con ninguno de estos grupos. Que tomen las medidas para que el dinero ilegal de las campañas no llegue a sus campañas y sus candidaturas”, subrayó.
Lo anterior hace referencia al nivel de violencia que, así como en años pasados, ahora se cierne sobre los políticos mexicanos, pues en lo que va del proceso electoral, se han registrado por lo menos siete casos de aspirantes asesinados; el primero de la lista fue Ricardo Taja Ramírez, precandidato a la alcaldía de Acapulco por Morena. Fue asesinado en diciembre en una pozolería en la zona Diamante de Acapulco. No obstante, en lo que va de enero son seis las víctimas, el caso más reciente es el del perredista Marcelino Ruíz Esteban, quien aspiraba la candidatura municipal por Atlixtac, Guerrero. En el ataque también murió su esposa, Guadalupe Guzmán Cano.
No comment yet, add your voice below!